8/2/10

Vigilancia Aduanera lleva un año con orden de realizar la mitad de patrullas

La Agencia Tributaria dice que intenta «hacer efectivos los recursos», pero los sindicatos temen el fin de los controles desde Asturias

08.02.10
Hace un año que el mar tiene menos ojos encima. El Servicio de Vigilancia Aduanera cuenta en su base de Gijón con una treintena de efectivos que hasta el anterior mes de enero patrullaban de forma permanente las aguas regionales. El objetivo de esa tarea era doble: requisar la droga que los narcotraficantes tratan de desembarcar y disuadir, con su mera presencia, que el delito fuera cometido. Sin embargo, la Agencia Tributaria, de la que depende este servicio, decidió aplicar un Plan de Navegación Selectiva que ha reducido a cuatro las salidas semanales.
«El propósito es desmantelar a Vigilancia Aduanera», sostiene el Sindicato Nacional de Vigilancia Aduanera (SNVA) sobre un recorte que la propia agencia admite haber aplicado a todas sus bases a excepción de las andaluzas y gallegas. «Quieren rentabilizar un servicio público como es la lucha contra el contrabando sin importarles que eso suponga llenar las calles de droga», acusan los representantes laborales.
Con esa inquietud, la central ha emprendido en las últimas semanas una campaña que consiste en remitir una carta a las asociaciones relacionadas con la lucha contra la drogadicción. En la misiva aseguran que en sólo once meses las capturas de hachís en aguas nacionales se han reducido un 300% «y las de cocaína han caído de 21,8 toneladas a apenas seis».
La Agencia Tributaria niega tal acusación. A la espera de cerrar la memoria-resumen de sus actuaciones en 2009, un portavoz certifica que «en ningún caso estamos aprehendiendo menos por haber reducido las patrullas rutinarias». El recorte aplicado en estas labores «no busca una reducción de costes, sino hacer efectivos los recursos con los que contamos», abundan las mismas fuentes. «Un análisis del comportamiento del patrullaje aduanero confirma, también en el caso asturiano, que en la mayoría de las bases no se da casi ninguna aprehensión desde que la agencia se creó en 1992».
El temor a un posible «desmantelamiento» de la vigilancia aduanera en la mar lleva un tiempo prendiendo en las filas del PP. Hace unos meses, tres congresistas del grupo popular reclamaron los datos de las horas de patrullaje, consumo de combustible y resultado del servicio en cada una de las 21 bases marítimas de la Agencia Tributaria. La última incautación cosechada desde Gijón se remonta a 2005, cuando se confiscaron 502,9 kilos de cocaína. Para ello fue necesario una constancia que consumió 44.883 euros en carburante sólo en aquel ejercicio.
El mismo esfuerzo se sostuvo en 2006, 2007, y 2008 con un resultado nulo en términos de incautaciones. El gasto en cambio, ascendió a 146.726 euros en combustible y unas 4.356 horas y 39 minutos de patrullaje. La faena alcanza una media de casi cuatro horas diarias. La aplicación del Plan de Navegación Selectiva, ha significado un drástico recorte. Los partes de enero y febrero de 2009 revelan que los trabajadores de la Agencia Tributaria habían 'peinado' la mar asturiana 112 horas y 29 minutos, esto es, menos de dos horas al día.
«Ahora lo que hacemos es destinar más recursos a las labores de investigación en tierra, algo que nos está dando muy buen resultado», explican en la Agencia Tributaria. Ese es el principio que el organismo lleva aplicando en los últimos años en todos sus frentes: intensificar las labores de seguimiento sobre aquellos que presentan un perfil más proclive al delito.
El Plan de Navegación Selectiva, en todo caso, no deja las aguas asturianas desguarnecidas. Las patrullas del fisco se hacen de forma aleatoria, en días alternos, para dificultar la labor de los narcotraficantes. Además la Guardia Civil también vigila el tráfico marítimo. 
 
http://www.elcomerciodigital.com/v/20100208/asturias/vigilancia-aduanera-lleva-orden-20100208.html