20/1/12


                               
   
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Persecución en alta mar de un yate repleto de droga

Habían creado una nueva ruta para introducir droga en España. Se hacían pasar por turistas y utilizaban un yate de lujo para su transporte. Los reporteros de A Fondo han tenido acceso a las imágenes que muestran el abordaje de la embarcación en alta mar y han seguido las investigaciones que han permitido desarticular una banda de traficantes.

Este es el abordaje de una patrullera del servicio de vigilancia aduanera a un yate de lujo cargado con un alijo de droga. Son imágenes en exclusiva conseguidas por los reporteros de A Fondo. Los agentes intentan detener la embarcación con ráfagas de punteros laser, pero los traficantes comienzan una huida frenética. A 15 nudos, de noche y con fuerte oleaje, la persecución es arriesgada. La patrullera embiste la popa del yate, llevándose por delante parte de su estructura. Sólo uno de los policías logra saltar a la embarcación.
El agente esta sólo pero logra reducir a los tres tripulantes y  parar los motores. En el puerto de Torrevieja comprueban que la embarcación está repleta de droga, 100 fardos, 3.300 kilos de hachís.
Durante seis meses el grupo greco levante, agentes especialistas en crimen organizado, han investigado  a una organización que introducía en España grandes cantidades de droga, utilizando una nueva ruta hasta,  ahora desconocida.
Antes el trayecto directo Marruecos - sur de la península. Pero para evitar la vigilancia, crearon un recorrido más seguro. Marruecos hasta las islas baleares, y bajo la apariencia de un viaje de placer llegar a la costa levantina.
El cabecilla de la red era Pieter Lambertus holandés de 64 años de edad. Durante seis meses fue  vigilado y fotografiado con miembros de su organización y con los responsables de distribuir el alijo en nuestro país. Para esta operación compró por un millón y medio de euros el yate interceptado, el Alexandra.
Días antes de cargar la droga, preparaban la embarcación. En tierra fue detenida otra persona, el encargado de guardar la droga que ya está en prisión junto al cabecilla de la red y sus dos lugartenientes.